
Todo funciona en la cinta de maravilla, incluyendo las actuaciones de los principales como James Franco, la bella Frida Pinto, y el veterano John Lithgow como el padre de Franco, sin olvidar todos lo secundarios.
En la forma que finaliza la historia, con una presentación de los créditos de una manera muy creativa, en la que lo visual nos sigue contando la historia, aunque ya es el final, (no les digo mas) nos hace suponer que vendra una continuación.
De ahora en adelante tendremos en la mirilla a Rupert Wyatt, porque con este trabajo nos demuestra que se podria perfilar como un gran director, logro con esta secuela lo que no pudo Tim Burton con "El Planeta de los Simios" del (2001), la cual estuvo muy por debajo de la original del 1968 dirigida magistralmente por Franklin Schaffer y protagonizada por los inolvidables Charlton Heston y Roddy Mcdowall.
Al recordar a Mcdowall, bajo su disfraz de mono con sus expresivos y grande ojos, sin duda que sentimos un poco de nostalgia, ya que en la nueva saga todos los simios actores, han sido sustituido por el pincel mágico, mejor conocido como ''el mouse"de los artistas gráficos de las computadoras, por ende sintiendo un poco frialda al saber que cuando vemos un mono en esta nueva producción, aunque sigue siendo un actor, este recibe encima de su imagen una especíe de maquillaje digítal, lo cual por mas bien logrado y avanzado, a mi entender le quita algo a la naturalidad de la imagen, es el mismo sistema que ya habian usado con anterioridad, Robert zemekis en "Polar Express", y James Cameron en "Avatar".
Por; José García.